Algunas veces los demás me dicen que soy aburrida por que a escasos días de cumplir 22 años no hago lo mismo que otras chicas de mi edad, para darles una idea:
Nunca falto a casa o llego a altas horas de la noche, respeto a mis padres y mi hogar; pues soy de las que prefiere un café a un antro, salir con mis amigas a comer o ir a alguna plaza a probarnos ropa.
No soy de las que tienen relaciones que no serán serias, mucho menos aventuras de una noche.
Soy una chica delicada, detallista y a veces perfeccionista; Hogareña por excelencia me gusta estar en mi casa y no salgo mucho; En el súper mi pasillo favorito es el área de blancos; Adoro realizar postres, de echo, colecciono figuritas de dulces en especial de cupcakes, así sean llaveros para el celular o collares.
En la escuela, soy dedicada amo mi carrera; y pese a que no soy un cerebrito de 10, Me siento feliz de mantener mi promedio en 9; tomo la carrera como lo que es, algo serio y algo que me llena de vida.
En mi tiempo libre adoro leer una novela ya que son mi debilidad, o leer alguna revista de moda, salud o belleza. Disfruto la naturaleza, esto tal vez sea por mi signo que es de tierra; Mis colores favoritos son: El morado, el verde militar y el café, también el rosa.
Así es que, por estas y muchas razones más, me dicen que soy aburrida y hasta ñoña o infantil, pues sí, soy una niña buena y no me arrepiento ni un tantito.
ORGULLOSA DE SER ASI.
Hoy en día hay chicas y chicos con una actitud bastante liberal, y no es que se deba ser conservador en extremo, pero como quién dice hay lugar, medida y tiempo para todo.
Me entristece ver a chicas que algunas veces llegan con muchísimas copas encima a la facultad, con su ropa mal acomodada y con expresiones faltas de respeto a la institución, es increíble que a estas alturas dentro de una formación universitaria sucedan estas cosas de “secundaria”; A chicos formando relajo en los pasillos próximos a los salones.
Me molesta sobremanera cuando la gente dice que soy anticuada y poco interesante, como si hacer ridículos fuera lo más importante para el éxito personal y/o profesional.
¡Soy una niña buena y estoy orgullosa de serlo!
Ser así tiene sus ventajas, especialmente tratándose de cuestiones amorosas, y de trabajo.
Los chicos que valen la pena, sueles fijarse en chicas más centradas, además, el tipo de hombre que se acerca a una chica así suele ser aquél que puedes invitar a tu casa, con la confianza y seguridad.
Si los chicos te perciben como la que anda de tras de todos ellos piensan : “Las queremos solo para un free” a estas chicas probablemente les cuesta mas trabajo conseguir un chico para una relación seria donde realmente las valoren y respeten.
LAS VENTAJAS DE SER NIÑA BUENA
En el ámbito académico y profesional: Puedes sembrar las bases para un futuro exitoso.
Al final del semestre puedes ser exentada de esos exámenes finales que traen a todos de cabeza.
Puede sonar aburrido, y quizás hasta cierto punto lo sea para algunas personas, pero los beneficios a corto, mediano y largo plazo definitivamente valen la pena.
SER UNA NIÑA TRAVIESA SIENDO UNA NIÑA BUENA.
¡Claro que se puede!, algunas personas no pueden creer que se pueda ser una chica mala siendo una niña buena, una niña buena también puede tener su tiempo de aventura.
Y es que no todo es siempre ser impecable sin diversión, definitivamente se puede ser una niña buena y tomar lo divertido de la vida; El punto es saber cómo equilibrar las cosas, hasta dónde tomar la copa y hasta dónde el libro.
Ser equilibrada no sólo por fuera, sino también por dentro, ser sincera contigo misma de quién eres, quién quieres ser y a dónde quieres llegar.
Hasta la próxima, Quimi Angy.
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